Si eres una persona diligente, lo cual es muy recomendable para evitar sustos y otros disgustos, estás en el lugar indicado.
Así que bienvenid@ seas nuestr@ diligente colega de aventuras, porque en esta ocasión vamos a tratar una serie de consejos básicos para el mantenimiento y cuidado del equipo de montaña, con los que podrás alargar su vida útil.
Además, si quieres ir adelantándote a eventuales problemas que puedan surgir en esas tan necesarias salidas a la naturaleza, sigue leyendo este artículo. Así, conseguirás que los contratiempos te pillen bien preparado.
Primero veremos cómo limpiar correctamente y reparar, si es necesario y conveniente, tanto el material de camping como el material de escalada.
Pero el mantenimiento y cuidado del equipo de montaña no se queda ahí…
Después de eso, también tenemos algunos consejos acerca de cómo guardar y transportar todo ese material. Con ello, lo encontrarás más rápido para salir a tu nueva aventura, sin perder tu apreciado tiempo ni disgustos de última hora.
¡Vamos allá!
Antes recuerda que, para utilizar cualquier equipo, debes leer atentamente las instrucciones sobre su uso, almacenamiento y cuidado, así como comprobar que está en buenas condiciones para su uso con seguridad.
Limpieza: La clave para el mantenimiento y cuidado del equipo de montaña
Limpiar el saco de dormir
El proceso es diferente según el relleno sea de plumón o sintético. En todo caso:
- No puedes usar cualquier detergente, sino alguno especial para dicho material. No es necesaria una lavadora, puedes lavarlo a mano en una bañera.
- Evita los suavizantes, ya que reducirán la transpiración de los tejidos y su capacidad para expandirse.
- Seca con ciclos de frío o bajo calor, para no estropear el aislamiento del forro. Como consejo, mete unas pelotas de tenis en la secadora para romper los bultos que puedan formarse y hacer que no se seque del todo. Y asegúrate de que no quede ningún bulto, porque si guardas el saco de dormir ligeramente húmedo, le saldrá un moho muy desagradable.
Limpiar y reparar la colchoneta hinchable
En primer lugar, sacude la colchoneta y límpiala con un paño húmedo, si sigue estando sucio. Acto seguido y si no lo has notado antes, comprueba si tiene fugas de aire, dejándola inflada durante la noche con algo de peso encima. Si se desinfla, habrá que repararla.
Para ello, la colchoneta debe estar totalmente deshinchada, seca y libre de restos de jabón, sobre todo alrededor del agujero. El jabón lo habrás de usar para localizar el agujero. Y, para tapar este, debes utilizar un parche redondo y pegamento, como te explican en este vídeo de Bricomanía.
Limpiar y reparar la tienda de campaña
Cuando vuelvas de acampada, si no quieres invitados inesperados, sacude tu tienda y debes (o deberías según tu nivel de tolerancia a la guarrería):
- Utilizar un cepillo para limpiar el barro seco.
- Limpiar las manchas con una esponja húmeda, pero sin detergente, porque este puede dañar el impermeable de la tienda.
- Secar tu tienda, dejándola un rato al sol para que no aparezcan moho y otros hongos con el tiempo.
Antes de guardarla, comprueba si hay daños en las cremalleras y los revestimientos, así como en los postes, los ajustadores de cabos, las lonas, etc. Asimismo, que no hay agujeros.
Para reparar los agujeros en la tienda de campaña, mira previamente las instrucciones del fabricante. Sin embargo, en general, los pequeños agujeros o roturas de la lona suelen tener una fácil solución: coser el agujero, aplicar un poco de cinta adhesiva a un lado de la lona y sellar el otro lado.
Limpiar los utensilios de cocina
- Como no vas a hacerlo en el campo (o no deberías si eres amigo del medioambiente), debes hacerlo en casa.
Primero, comprueba que tu equipo de cocina está completo, para que en tu próxima aventura no tengas que volver a la edad de piedra. Además:
- Lee atentamente las instrucciones del fabricante.
- Revisa el camping gas, sacando fuera la bombona y colocándola lejos de cualquier fuente de fuego, calor o líquido inflamable.
- Mira si funciona bien el encendedor eléctrico del hornillo y, si es necesario, cámbialo por otro del mismo fabricante.
Mantenimiento y cuidado del equipo de montaña para escalada
No nos íbamos a olvidar de los escaladores.
Cuerdas y arneses
Debes tener ciertas precauciones. Por ejemplo, que no entren en contacto con objetos afilados o cortantes ni con el sol, el calor, la humedad u otras sustancias, utilizando siempre una funda.
Para aumentar la duración de la cuerda, debes ir cambiando de cabo a rabo en cada escalada y, si hay aristas, utilizar un protector de cuerda. Sobre todo, es esencial ser cuidadosos las primeras cuatro o cinco veces de uso de la cuerda.
Como consejo, las cuerdas de escalar duran más si no absorben el polvo o si se usan mojadas.
Y, en todo caso, al recoger y desplegar la cuerda, debes controlar con el tacto y la vista que no hay cortes, abrasiones, desgastes o deslizamientos, así como mantenerlas limpias mediante cepillados o lavados. Eso sí, evitando el agua a más de 30 ºC, el agua salada, el jabón neutro, el centrifugado y la lejía.
Para cortar las cuerdas y cordinos, deberás hacerlo preferiblemente con una máquina soldadora.
Asimismo, recordar que fecha límite de vida útil son 15 años desde su fabricación o 10 años desde el primer uso.
Objetos metálicos
Según los expertos, tras una caída, pueden seguir utilizándose, siempre y cuando los cierres y partes móviles funcionen perfectamente.
El mantenimiento y cuidado del equipo de montaña metálico, como mosquetones, aseguradores, poleas, bloqueadores o levas (friends), se limita a mantenerlo seco, eliminar la suciedad y comprobar su perfecto funcionamiento, si quieres vivir.
Eso sí, los expertos recomiendan cambiar las tuercas y tornillos, cuando se observen daños en los mismos.
Para quitar la suciedad, debes utilizar un trapo fino, una bayeta de microfibra o un bastoncillo de algodón. Y, ante la porquería más rebelde, te valdrá un cepillo pequeño y suave.
Para afilar el material de escalada, como piolets y crampones, debes hacerlo con una lima y a mano, en todo caso, respetando los ángulos originales y con cuidado, porque el calor generado podría alterar la resistencia de la aleación. También puedes intentar enderezar un pitón blando, siempre que no se produzcan grietas.
Orden y sensatez: La clave para poder salir pitando y evitar los sustos de última hora
No dejes el equipo de montaña tirado en cualquier sitio. No solo dará muy mala imagen sobre tu persona, sino que podría ensuciarse o alguien podría pisarlo y dañarlo, entre otras calamidades.
Por tanto, para completar tu formación como experto en el mantenimiento y cuidado del material de montaña, también deberás almacenarlo y transportarlo correctamente.
Almacenamiento
Después de limpiar del material de montaña y de haber comprobado que sigue en condiciones para su próximo uso con total seguridad o, en su caso, de haber hecho las pertinentes reparaciones, debes guardarlo en un lugar seco y con buena ventilación.
Asimismo, el lugar que elijas para guardar el equipo debe estar fuera del alcance de los niños y de la luz solar directa o la radiación UVA, así como de líquidos, ácidos u otros productos químicos, que pueden causar daños internos y no visibles a primera vista.
Para guardar el saco de dormir, una vez comprobado que está completamente seco, aunque los sacos de compresión pueden ahorrarte espacio, usarlos a largo plazo puede dañar el relleno. Por ello, es mejor guardarlo en una bolsa de tela algo más grande y como quede, en vez de doblarlo y enrollarlo perfectamente, ya que así puedes provocar puntos fríos.
- Para guardar la colchoneta hinchable, puedes hacerlo debajo de tu cama o en otro lugar donde quede plana, holgada y siempre con la válvula abierta.
Para guardar tu tienda de campaña, es importante que esté totalmente seca y que quede suelta y pueda ventilarse, en vez de enrollada en una bolsa de compresión o un contenedor hermético. Ello, porque la humedad puede hacer que el revestimiento se vuelva pegajoso y se rompa al desenrollar la tienda. Tranquilidad, si lo detectas pronto, podrás rescatarla.
Transporte
Por último, cuando debas transportar tu equipo, lo más aconsejable es hacerlo dentro del mismo embalaje que utilizas para guardarlo en casa. Y, en todo caso, asegurándote de que ningún objeto afilado pueda dañarlo durante el transporte.
Además, evita que el equipo quede expuesto a altas temperaturas, porque estas pueden quebrar su resistencia y deformar los materiales, sobre todo, si son plásticos y metales.
Así que, para un buen mantenimiento y cuidado del equipo de montaña, mucho cuidado con dejarlo dentro de tu coche aparcado al sol durante un largo rato.
Esperamos que este artículo te haya sido de utilidad. ¡Nos vemos en otro de los Posts de Wildrent!
